Arreboles

¿Has notado tú chiquilla
el color de un arrebol?
¿cómo puede ser que el sol
nos brinde esta maravilla?
con colores de semilla
de trigo candeal precioso
nos deleita primoroso
a modo de despedida,
regalando en su partida
mil colores veleidosos.

Mil colores veleidosos
he visto al atardecer,
como casi sin querer
los rayos del sol sinuosos,
cual abrazo cariñoso
las nubes van envolviendo,
de colores van cubriendo
azules, lilas, rosadas,
rojas, naranjas, moradas,
las nubes se van tiñendo.

Las nubes se van tiñendo
en las tardes otoñales,
¡cuánta memoria a raudales!
esta imagen va trayendo,
mi memoria va corriendo
a un tiempo ya muy lejano
caminando de la mano
los senderos de los hualles,
en que descubrí el detalle
de arreboles en verano.

De arreboles en verano
mi memoria está colmada,
plasmó el cielo en mi mirada
sus colores cual arcano,
del refugio resolano
sorprendida yo observaba,
el color que ya asomaba
en tanta nube preciosa,
que en el cielo silenciosa
mi pupila enamoraba.

Mi pupila enamoraba
el ocaso en primavera,
cuando llegaba primera
en busca de una bandada,
que me llevara allá alada
volando cual candelilla,
a pasearme en las orillas
de los rayos de aquel sol,
el color de un arrebol
¿has notado tú chiquilla?

(M. Ch.)